El éxito de la innovación no recae únicamente en los departamentos técnicos; la participación activa y comprometida de la dirección general es esencial. Este artículo explorará la importancia del compromiso personal de la dirección general en los procesos de innovación, destacando cómo la falta de este compromiso puede conducir a disfunciones ocultas y determinantes para el fracaso.
Compromiso personal: el motor de la innovación empresarial
La falta de compromiso de la dirección general en los procesos de innovación se presenta como una disfunción que puede afectar gravemente a la empresa. Cuando los directivos no muestran interés en la innovación, la gestión de este proceso se vuelve caótica. Este desinterés se agrava en empresas donde los directivos no provienen de un trasfondo técnico, siendo abogados, financieros o expertos en marketing.
La gestión de proyectos de innovación requiere un entendimiento profundo de las tecnologías involucradas. La falta de conocimiento de la dirección general puede llevar a decisiones equivocadas en la elección y uso de tecnologías, especialmente en empresas más pequeñas donde tales errores pueden ser fatales.
La imposición de plazos irrealizables por parte de la dirección general sin comprender completamente los desafíos tecnológicos puede llevar a proyectos que no solo se retrasan significativamente, sino que también experimentan costos e inversiones duplicados. La falta de comprensión de las tecnologías por parte de los directivos puede generar caos en la gestión de la innovación, afectando la viabilidad y el éxito de los proyectos.
Desafíos de la dirección general frente a las tecnologías
La aversión de los directivos hacia las tecnologías presenta desafíos significativos. Se percibe erróneamente que las decisiones tecnológicas deben dejarse en manos exclusivas de técnicos. Sin embargo, la innovación impacta en todas las funciones de la empresa y requiere una comprensión integral. Muchos directivos, no siendo ingenieros ni científicos, evitan mejorar su conocimiento tecnológico por miedo a no ser competentes.
Se argumenta comúnmente que los directivos no deben descender a los detalles tecnológicos para mantener una perspectiva general, pero este enfoque puede resultar en la falta de comprensión de cómo las tecnologías afectan a todas las funciones de la empresa y su estrategia.
Las decisiones sobre tecnologías no deben limitarse exclusivamente a los técnicos. Los directivos deben conocer aspectos esenciales de las tecnologías utilizadas en proyectos de innovación, como su competitividad, el personal necesario, la etapa de desarrollo, la certeza de los resultados y su influencia en la economía y la gestión empresarial. Aunque no necesitan conocer detalles técnicos específicos, deben comprender lo suficiente para tomar decisiones informadas que afectarán a toda la organización.
El papel de la dirección general en el proceso de innovación
La dirección general no puede renunciar al control del proceso de innovación. La falta de supervisión puede conducir a problemas con los equipos técnicos, como promesas incumplidas, costes inesperados e inversiones no rentables. Para evitar estas situaciones, los directivos deben aprender y aplicar conceptos básicos relacionados con el proceso de innovación.
Es esencial que los directivos intervengan desde el principio, estableciendo objetivos claros en aspectos como estimación de costes, tiempo de recuperación del capital y tasa de rentabilidad. La participación activa de la dirección general en la supervisión y establecimiento de objetivos garantiza el éxito del proceso de innovación.
Formar un equipo y establecer objetivos claros desde el principio
La creación de un equipo sólido para proyectos de desarrollo de productos o innovación es esencial. Este equipo debe contar con el respaldo y la supervisión de la dirección general, que, a pesar de no necesitar un conocimiento detallado de las tecnologías, debe estar al tanto de los aspectos clave que afectarán al proyecto. Establecer objetivos claros desde el principio, en áreas como costos, tiempo y rentabilidad, es crucial para el éxito del proceso de innovación.
Conclusiones: compromiso
En conclusión, en un entorno empresarial caracterizado por cambios tecnológicos rápidos, la dirección general no puede menospreciar las tecnologías. El compromiso personal de los directivos en los procesos de innovación es crucial para evitar disfunciones y garantizar el éxito de los proyectos. La formación de equipos, el uso de modelos de procesos válidos y la eliminación del pensamiento mágico son elementos esenciales. La dirección general debe liderar estos esfuerzos desde el principio, asegurando que los objetivos estén claros y acordados con los equipos de proyecto. Sin la dirección general comprometida, la innovación se convierte en un desafío insuperable para cualquier empresa.
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