El salario emocional se basa en un principio que está cada vez más en auge: el valor de las personas. Cada vez más, los empleados son conscientes de que están entregando a una compañía su bien más preciado: su salud mental.
Hace unos años, el principal factor para aceptar un trabajo o para cambiarse era el salario económico, los beneficios del trabajador se medían únicamente a través de esa ratio. Pero ahora, cada vez se tienen más en cuenta otros factores determinantes en la calidad de vida del ser humano.
Qué es el salario emocional
El salario emocional es la retribución de carácter no económico que un trabajador obtiene en cuanto a las facilidades que se le dan a la hora de satisfacer sus necesidades personales, familiares y profesionales, mejorando su calidad de vida y contribuyendo a la conciliación laboral.
Se trata de un valor que hace referencia a las prestaciones que las personas obtienen en sus trabajos, algo que se está empezando a valorar más incluso que el propio sueldo.
Esto último se debe a que el salario emocional es el que decide la felicidad laboral de un trabajador, que es a su vez determinante a la hora de tomar decisiones importantes como cambiar o elegir un trabajo.
Además, entra en juego otro término vital: la motivación. Se ha demostrado que un elevado salario económico no garantiza un nivel alto de motivación, pero un elevado salario emocional sí.
Como la empresa cuida a su equipo y cómo establece un equilibrio entre la vida personal y la laboral incide de manera directa en el bienestar del equipo.
El salario emocional: la nueva era
Aunque suene algo exagerado, se puede afirmar que en el mundo empresarial, el salario emocional está marcando una nueva era. Hoy en día, los empresarios y directivos se están teniendo que enfrentar a lo que muchos expertos ya denominan “la gran renuncia”. Este fenómeno que empezó con la pandemia ha desembocado en millones de trabajadores en todo el mundo dejando su empleo en búsqueda de unas condiciones mejores.
La importancia de la salud mental y acceso global a redes sociales como LinkedIn han provocado que los trabajadores se interesen mucho mas por la calidad de vida que tendrán a la hora de elegir un empleo. Por ello, una de las claves para atraer, retener y ganar la batalla de talento es el cuidado del salario emocional.
Los empleados han cambiado de prioridades y es que encuestas realizadas por importantes consultoras que recogen respuestas de Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Canadá, India y Singapur, afirman que las dos principales causas de abandono de un puesto de trabajo son (en ese orden):
- La falta de desarrollo de la carrera laboral
- No recibir suficiente reconocimiento por el trabajo realizado
A estas razones se le suma la presencia de un líder que no se preocupa, la falta de motivación laboral o un entorno donde los compañeros no ofrecen el apoyo adecuado.
La importancia del salario emocional
Con todo lo mencionado anteriormente, se puede concluir que cuidar la motivación de los empleados de una compañía es esencial. Más que la retribución económica.
Además, esto va ligado a los beneficios. Cuánto más partícipes se sientan los trabajadores y más involucrados y valorados se sientan, más eficaces serán a la hora de realizar sus tareas y por lo consiguiente, mayores beneficios generarán.
Según los datos de la empresa estadounidense de análisis y asesoría Gallup, el compromiso por parte de los empleados felices se traduce en un 21% de aumento en las ganancias, un 17% más de productividad y un 20% más en ventas.
Cómo implantar el salario emocional
Una vez conocida su importancia y los beneficios que genera, la pregunta clave es ¿Cómo puedo implantarlo en los empleados?
Pues bien, lo primordial es conocerlos. Conocer sus gustos, sus preferencias y sus estilos de vida. De esta manera se podrá saber con mayor precisión qué les hace felices o qué les motiva para dar su 100%.
Los puntos clave para una correcta implantación del salario emocional pueden resumirse en:
- Que los empleados se sientan parte del propósito de la organización
- Que las personas que forman parte de un equipo formen parte de las decisiones que les afectan como profesionales
- Que el trabajo sea un lugar donde se pueda disfrutar
- Sentimiento de pertenencia de los empleados en la compañía
- Desarrollo profesional
- Cuidado de la vida personal
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