¿Te has planteado en los últimos meses si tu empresa está preparada para hacer frente a la corriente digital que se avecina? Si bien es cierto que una crisis como la actual puede resultar un duro golpe para la economía global, también puede convertirse en un punto de inflexión. Una pausa en el camino en la que aprovechar la intensidad del momento para digitalizar tu empresa, tomar un impulso inesperado, redefinir la propuesta de valor y emprender una nueva ruta hacia otra dirección. Una dirección mejor, una dirección transformadora.
Lo que debemos tener claro es que digitalizar tu empresa ya no es una opción. El escenario actual, consecuencia de una aceleración «forzosa» provocada por la pandemia, así nos lo muestra. Y así lo reflejan las cifras. Según un informe elaborado por Salesforce, el 69% de los CEOs españoles afirma haber acometido algún tipo de transformación digital en sus negocios como respuesta al COVID-19.
No obstante, y a pesar de percibir esa voluntad de cambio, muchos negocios aún no tienen claro que supondrá realmente para su empresa o cómo llevar a cabo ese proceso transformación digital. Y todo ello a un ritmo que las organizaciones no son capaces de seguir si no van de la mano de un experto que les ayude.
Un ejemplo de ello lo hemos visto aquellos comercios que debido al confinamiento han tenido que trasladar su negocio a un entorno digital para poder sobrevivir. Y no hablamos de grandes empresas. Tal y como señala Cesar Cernuda, ex directivo de Microsoft, en una entrevista en Expansión:
“Tenemos grandes compañías en España. El desafío no es cómo abordar la digitalización del Ibex 35 o de las grandes empresas españolas. El gran reto es cómo transformamos las pymes, que es el tejido empresarial español”
CESAR CERNUDA, Presidente de NETAPP
¿Por qué necesito digitalizar mi propuesta de valor?
¡Pero ojo! No cometamos el error de considerar esta apuesta por digitalizar tu empresa como una moda puntual. Poco tiene que ver con la inercia del momento y mucho con los beneficios reales de acometer este tipo de cambios en la empresa.
No obstante, las empresas que ya han iniciado esta transición también se han encontrado con algunos problemas a la hora de digitalizar el negocio.
Entre ellos, hemos detectado los siguientes:
- La empresas centra sus esfuerzos en adquirir las tecnologías más punteras de su sector en lugar de analizar y mejorar la propuesta de valor de su negocio apoyándose en estas tecnologías. Recordemos, las nuevas tecnologías no son el fin, son el medio.
- Subestimar las tecnologías más tradicionales al no considerarlas suficientemente válidas para transformar su negocio.
- Digitalizar tu empresa debe llevarse a cabo en todas las áreas de la empresa. Muchas pymes tienden a enfocar su estrategia digital tan solo en el departamento de Marketing.
- Su mayor preocupación se focaliza en digitalizar los productos y los servicios de la empresa en lugar de mejorar la experiencia cliente a través de la integración de elementos digitales.
Teniendo en cuenta este contexto, exponemos las tres principales ventajas que la digitalización aporta a cualquier negocio.
Captación exponencial de clientes
La presencia básica de un negocio en Internet, entendiendo esta como el disponer de un site corporativo, posicionamiento en buscadores y una actividad constante en redes sociales, supone un elemento indispensable para tener notoriedad de marca. La visibilidad de una empresa que no tiene presencia en el entorno digital a día de hoy es prácticamente inexistente. Por ello, la promoción digital de cualquier negocio es un gran aliado para decir quiénes somos y lo qué hacemos. Es decir, la captación de clientes tradicional pero aumentada exponencialmente por toda la red.
Mejora de la productividad y ahorro de costes
La apuesta por digitalizar tu empresa y la integración de elementos tecnológicos con el fin de digitalizar ciertas operaciones de la empresa supone una mejora automática de los tiempos dedicados a esas labores. E indudablemente un ahorro de costes. ¿Qué tipo de actividades son susceptibles de ser optimizadas? Gestiones administrativas, la logística y el transporte, la comunicación interna y externa, finanzas…
Mejora de la propuesta de valor y satisfacción del cliente
En el caso de aquellas empresas ubicadas lejos de los centros neurálgicos de las ciudades, la presencia en Internet del negocio es fundamental para comunicarse con el cliente. Gracias a los canales digitales, la interacción con el cliente es continua, a coste cero y totalmente personalizada. Esta interacción favorecerá enormemente la mejora en la calidad en el servicio, la satisfacción del cliente y el feedback constante sobre sus necesidades.
Pasos para añadir la digitalización a mi propuesta de valor
Como hemos visto, transitar hacia una digitalización efectiva puede incrementar la productividad de la empresa, aumentar la captación de clientes, generar más ingresos y mejorar la experiencia cliente. Analicemos ahora los pasos a seguir para añadir la transformación digital a la propuesta de valor de la empresa:
Primer paso: cambio en la cultura empresarial
El éxito de acometer un proceso de digitalización no reside solo en aprovechar la tecnología. El éxito viene cuando somos capaces de integrar esta nueva mentalidad en todas las áreas del negocio, cuando se convierte en el ADN de nuestra empresa. Desde los propios procesos hasta el mismo modo de pensar de los trabajadores. Para ello, es fundamental que exista una participación, apoyo y consenso en todos los niveles de gestión de la empresa respecto a esta transformación.
Segundo paso: ser prudentes
Debemos ser capaces de generar una nueva propuesta de valor gracias a la tecnología mediante la observación del cliente y su entorno social. Pero recomendamos hacerlo con calma. No es necesario lanzarse precipitadamente a la transformación del negocio sin analizar previamente nuestro punto de partida y entender a dónde queremos llegar.
Tercer paso: crear un equipo de transformación digital o incluir apoyo externo
Para digitalizar la propuesta de valor de tu empresa es importante contar con el talento apropiado y que esté capacitado para ello. En este caso, hay dos opciones. Por un lado, disponer ya de estos perfiles dentro de nuestra organización y encargarles la tarea de redefinir los procesos y ponerlos en práctica. Por otro, y en caso de no contar con estos perfiles, lo más recomendable es solicitar ayuda de una empresa externa que cuente con una amplia experiencia implementando planes de este tipo.
Cuarto paso: crecimiento paulatino y constante
Evidentemente, los resultados no empezarán a verse desde el momento en el que el negocio se traslade al ámbito digital. En primer lugar, se dará una etapa de reconocimiento de marca en la que la empresa se dará a conocer y un posicionamiento paulatino en el sector. En este sentido, Jesica Alcalde, CEO de Fuelyourbrands, hace un apunte muy acertado en un reportaje del El Español:
“Digitalizar una pyme es ir más allá de crear una página web, significa poder llevar a cabo tu venta de manera online, que el negocio continúe funcionando igual de bien que en un punto físico”
JESICA ALCALDE, CEO de FUELYOURBRANDS
Quinto paso: poner el foco en la experiencia cliente
Todo el proceso de digitalización de la propuesta de valor de la empresa debe tener un objetivo muy claro: mejorar la experiencia del usuario. Usar la tecnología para escuchar, medir y monitorizar será una de las claves que mejorará la relación con los clientes. Igualmente, las herramientas digitales permiten realizar un seguimiento más profundo de la satisfacción del usuario e incluso propiciar nuevas ventas.
En definitiva, la transformación digital está cada vez más presente en las empresas y está comprobado cómo se ha convertido realmente en una ventaja competitiva. Y más aún: en un requisito indispensable para sobrevivir en el mercado.
Si no sabes por donde empezar este proceso o te has quedado a medio camino, no dudes en contactar con nosotros. Te ayudaremos a dar el cambio que tu negocio necesita para hacer frente a los nuevos avances en tu sector y te guiaremos en la implantación de procesos transformadores.